Receta: Pan semi integral sin gluten

CELIACOS - VEGETARIANOS - VEGANOS

De todos es sabido que el pan blanco no es todo lo saludable que lo creíamos ya que contiene mucho almidón y pocos beneficios nutricionales, es escaso en vitaminas y minerales debido al gran procesamiento industrial que sufre. 

Sin embargo, desde CeliVeggie quiero contribuir a recordar las propiedades beneficiosas del pan (integral o con semillas) y la importancia de incluirlo en la dieta de forma equilibrada. El pan es una gran fuente de hidratos de carbono, de fibra, de vitaminas del grupo B principalmente y de minerales como calcio, cinc, fósforo...

Hoy quiero compartir contigo una receta de pan sin gluten multivitamínico, sin lactosa, sin huevo y vegano.

Se trata de un pan muy nutritivo ya que a la receta básica (harina, agua, levadura) le hemos añadido una serie de suplementos ricos en vitaminas y minerales que hacen que mejore nuestro pan tanto en en sabor como en sus propiedades.

Tiene un sabor riquísimo y una textura esponjosa pero resistente. Este pan sin gluten puede utilizarse para hacer sandwiches y tostas sin que se desmorone. 

- 250gr de harina proceli (preparado panificable)

- 25gr de harina de arroz integral.

- 25gr de harina de quinoa integral.

- 250ml de agua.

- un sobre de levadura de panadería y media cucharadita de azúcar.

- 1 cucharada de: levadura nutricional, semillas de sésamo molidas, lecitina de soja, semillas de lino molidas y maca.

- una cuchara de aceite de oliva.

- una cucharadita de sal.

- una cucharada de miel/agave...
- semillas variadas (sésamo, lino chía...).

En esta ocasión he utilizado la panificadora. Si no tienes una, puedes preparar este rico pan amasando y horneando de la manera tradicional, con bolsa de asar, en molde...

1. En la cubeta de la panificadora, verter un chorreón de aceite de oliva.
2. Mezclar los ingredientes secos: harinas, levadura nutricional, semillas de sésamo molidas, lecitina de soja, semillas de lino molidas, maca y sal. Ponerlos en la cubeta.
3. A continuación, calentar un poco el agua. Echarla sobre la mezla SALVO 1/4 de un vaso que reservaremos.
4. Añadir también un poco de miel a la cubeta y mezclar todo ligeramente.
5. Para preparar la levadura, coger el vaso con el cuarto de agua, echarle media cucharadita de azúcar (ya que ayuda a fermentar la levadura) y echarle un sobre de levadura de panadero. Mezclar y dejar fermentar unos minutos. Pasado ese tiempo la levadura habrá subido 3/4 o 4/4 en el vaso.
6. Echar la levadura sobre la mezcla de la cubeta, cerrar la tapadera e iniciar el programa.

En mi panificadora los tiempos de preparación y horneado han sido:

- 20 minutos de amasado
- 20 minutos de levado.
- 20 minutos de amasado.
Justo antes de que termine este último amasado, añadir, si se desea, un puñadito de semillas.
Cuando termine el amasado, quitar las paletas amasadoras para que el pan salga entero.
- 60 minutos de levado.
- 60 minutos de horneado.

Dejar enfriar sobre una rejilla para que suelte el vapor de agua y no se quede húmedo.

Si no lo vas a consumir en pocos días, aconsejo congelarlo en rebanadas y así disponer de pan en cualquier momento y de forma rápida (basta con tostarlo un poquito).

¡Espero que lo pruebes y que disfrutes de sus beneficios! Tiene múltiples propiedades: es energético, antioxidante, antiestreñimiento, fortalece huesos, pelo y uñas y mejora de la piel gracias al conjunto de vitamina B de sus ingredientes, estabiliza el sistema nervioso, disminuye el colesterol, es saciante y ayuda a mejorar las digestiones ¡Es una maravilla!

¡Hasta pronto!

NO CREAS LOS FALSOS MITOS, EL PAN ES BUENO.